Cuando azota un desastre, el último lugar en el que desea estar es atascado en una fila en la tienda de la esquina. Tener una reserva de alimentos – o lo que los preparados para el día del Juicio Final llamarían una ”despensa de supervivencia o desastre” – es esencial si desea sobrellevar una catástrofe y sus consecuencias.
¿Qué son las Provisiones de Emergencia a Corto Plazo?
Existen provisiones de emergencia a largo plazo y a corto plazo. Las provisiones de emergencia a largo plazo son aquellas que tienen largos períodos de duración en los estantes, y pueden sustentarle de forma indefinida. Corresponden a aquellos productos comestibles que pueden mantenerse estables al almacenamiento por un largo tiempo. Los productos comestibles que son comercializados como provisiones a largo plazo usualmente son enlatados o empaquetados y pueden no parecerse a aquellos alimentos que consume de forma regular.
Las provisiones de emergencia a corto plazo, en tanto, no tienen una duración tan larga pero pueden mantenerle nutrido mientras aguanta lo peor del desastre. Pueden incluir alimentos que consume normalmente y/o comidas favoritas, por ejemplo, aquellas que no necesariamente perduran o son particularmente nutritivas, pero que son importantes porque usted o su familia disfrutan consumirlas.
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