El seminario de C. G. Jung dedicado al yoga Kundalini, impartido en octubre y noviembre de 1932 en el Club de Psicología de Zúrich, constituye originalmente un comentario psicológico a las conferencias dictadas poco antes en ese mismo escenario por el indólogo Wilhelm Hauer. El propio Jung había valorado la invitación cursada a Hauer como un signo de los tiempos extraordinariamente revelador: ‘¡Consideren lo que significa que el terapeuta, que tiene que tratar directamente con gente que sufre y, por tanto, muy sensible, establezca contacto con una terapia oriental!’.
El yoga participa de dos nociones que son comunes a toda la filosofía y religión indias: la reencarnación y la búsqueda de liberación del ciclo de nacimiento, muerte y renacimiento. Pero aunque el tantrismo, al que pertenece la escuela del yoga Kundalini, fue un movimiento religioso y filosófico, el interés de Jung por el yoga tántrico es eminentemente psicológico, pues ve en él un proceso natural de introspección. Si la filosofía india entiende que hay ciertos estados no-yoicos que influyen en la psicología personal, la meta del desarrollo humano sería producir una aproximación y una relación entre la esencia específica del no-yo y el yo consciente. En palabras de Jung, ‘los cakras se convierten en una guía valiosa en este oscuro campo, porque Oriente, y la India especialmente, han intentado siempre entender la psique como un todo’.
About the author
Nace en 1875 y fallece en 1961. Psiquiatra y psicólogo suizo, fue el fundador de la escuela de Psicología analítica. Después de sus estudios de medicina en Basilea, se dedicó a la práctica de la psiquiatría e introdujo en ella, junto con Eugen Bleuler, el psicoanálisis freudiano. Tras su ruptura con Freud a finales de 1912 comienza la elaboración de su propia orientación analítica, conocida también como ‘psicología de los complejos’. Durante los últimos treinta años de su vida, el estudio de la alquimia le proporcionará a Jung una orientación hermenéutica fundamental.