La sirena negra (1908) es la novela que pone fin a Triunfo, amor y muerte, trilogía dedicada a la escritora gallega Emilia Pardo Bazán. La obra, escrita en primera persona y protagonizada por Gaspar de Montenegro, un personaje cínico, celoso y obsesionado con la muerte, se ve implicado en una sucesión de hechos que le traerán alguna que otra sorpresa. Las contradicciones de los personajes ofrecen un tono agrio a esta obra naturalista y cargada de simbolismo.
Über den Autor
Doña Emilia Pardo Bazán, conocida también como Condesa Pardo Bazán, título que le otorgó el rey Alfonso XIII, nació en una familia gallega noble el 16 de septiembre de 1851, en Madrid. Fue mujer novelista, poeta, periodista, ensayista, crítica literaria, traductora, Conferenciante introductora del naturalismo en España, dramaturga y editora; feminista precursora que reivindicó los derechos de la mujer y la importancia de su instrucción como principio fundamental del porvenir del género.
Su padre, José María de Pardo Bazán, creyente de los derechos de la mujer y fiel progresista, le proporcionó a su hija una educación que fomentó su amor por la literatura. Educada en casa, comenzó a escribir pequeños relatos con apenas diez años. Una de sus primeras novelas, Aficiones peligrosas, la escribió cuando solo tenía trece años. Su formación se basó en idiomas, literatura, historia y filosofía.
No pudo asistir a la universidad porque estaba prohibido para las mujeres a finales del siglo XIX. En 1879 Se publicó su primera novela, Pascual López: autobiografía de un estudiante de medicina. A pesar de sus intentos por entrar en la Real Academia Española, jamás se aceptó su solicitud, tal y como le había sucedido a Gertrudis Gómez de Avellaneda, con la respuesta de que no podía pertenecer a la RAE porque ‚esta era una cosa de hombres‘. Emilia se lo tomó con humor y respondió: ‚Si los señores académicos no quieren verme entre ellos porque dedican las sesiones a contar chistes verdes, cometen un error: yo me los sé buenísimos‘.