Un libro provocador e irreverente de uno de los grandes autores de la literatura francesa
Las once mil vergas narra la historia de Mony Vibescu, un hospodar rumano que se embarca con destino a París a la búsqueda de aventuras, donde conoce a Culculine d’Ancône, una prostituta con la que se verá inmerso en numerosas y truculentas aventuras sexuales a partir de ese momento. Tras su regreso a Bucarest, el protagonista es invitado a participar en la Guerra rusojaponesa en calidad de teniente ruso, lo cual acepta motivado por las ‚perversiones‘ que una guerra es capaz de proporcionar y encubrir. Efectivamente, el escenario resulta perfecto para que entre el caos y la violencia de un conflicto se desarrollen las escenas más depravadas.
Publicado en 1907, Apollinaire sacó a la luz su obra bajo el anonimato y pronto esta se difundió por todo París.Por su temática erótica, el libro ha sido inevitablemente comparado con la obra del marqués de Sade, si bien la de Apollinaire exhibe una mayor violencia y brutalidad. Autores como Braque, Aragon, Picasso o Bretón reivindicaron su narrativa como un exponente del movimiento surrealista, que ellos defendían.
Über den Autor
Guillaume Apollinaire, de nacimiento Wilhelm Apollinaris de Kostrowitzky (Roma, 1880-París, 1918), fue un poeta, novelista, periodista y crítico de arte francés. Tras el abandono de su padre, su infancia transcurrió entre Mónaco, Cannes y Niza, y en 1900 se instaló finalmente en París, donde se abrió paso en los círculos literarios y artísticos y entabló amistad con Alfred Jarry, Derain, Picasso y otros artistas y poetas que marcarán el arte moderno del siglo xx. En 1907 publicó de manera anónima los relatos eróticos Las once mil vergas y Las hazañas de un joven don Juan (1911), que circularon de forma clandestina. A ellas se sumaron los poemarios por los que es fundamentalmente conocido: Alcoholes (1913) y Caligramas (1918), así como Il y a (1925), Le guetteur mélancolique y los Poèmes à Madeleine (1952), publicados póstumamente. Entre sus cuentos destacan El encantador putrefacto (1909), El heresiarca y Cía (1910) y El poeta asesinado (1916), así como su drama ’surrealista‘ Las tetas de Tiresias (1917). Tras participar en la Primera Guerra Mundial, en la que resultó herido, murió en París en 1918 a causa de la pandemia de gripe que asoló Europa.