Noche de amor con el jeque – Lucy Monroe Angele ansiaba consumar su relación con el príncipe heredero Zahir tras casarse con él. Inocentemente, anhelaba que su prometido la esperara, como ella lo esperaba a él. Pero unas comprometedoras fotografías sacadas por unos paparazis acabaron con sus sueños de juventud. Angele no estaba dispuesta a convertirse en la mujer de Zahir por obligación, ni someterse a un matrimonio sin amor. Romper… pero no sin imponer una condición. La prometida del desierto – Lynne Graham Bethany estaba desesperada por evitar que la deportaran y sólo el príncipe Razul, al que había intentado olvidar con todas sus fuerzas, podía ayudarla. Había tenido una relación con él dos años atrás, pero en aquella época no había sido capaz de manejar a aquel apasionado y orgulloso hombre. Bethany tenía que quedarse en Datar. Sin embargo, al reanudar su íntima amistad con Razul tuvo que pagar un alto precio. ¡Razul le pediría que se convirtiera en su esposa! El rey de las arenas – Sharon Kendrick Francesca se quedó sorprendida cuando Zahid al Hakam, apareció en la puerta de su casa. ahora era el jeque de Khayarzah y debía de estar acostumbrado a moverse en otros ambientes. Seguía tan atractivo como siempre y ella se sintió tentada a aceptar su invitación de ir a trabajar con él a su país. Zahid descubrió que la desgarbada adolescente que él conoció se había convertido en toda una belleza. ¿Sería justo tener una aventura secreta con ella? Un jeque despiadado – Sandra Marton Un minúsculo biquini no era el atuendo que le hubiera gustado llevar a Rachel Donnelly al conocer al jeque Karim al Safir. Sobre todo siendo él tan atractivo y estando… tan vestido. Karim se quedó horrorizado al conocer a la madre de su recién descubierto sobrino. La emoción que sintió al contemplar el cuerpo medio desnudo de Rachel contradijo su reputación de jeque sin corazón, pero lucharía con todas sus fuerzas para asegurarse de que el heredero al trono fuera educado en Alcantar.
Über den Autor
Sharon Kendrick empezó a contar historias a los once años y nunca ha dejado de hacerlo. Le gusta escribir novelas románticas con héroes tan sexys que te harán sentir bien. Vive en la hermosa ciudad de Winchester, donde puede ver la catedral desde su ventana (¡si se pone de puntillas!). Tiene dos hijos, Celia y Patrick, y sus pasiones son la música, los libros, cocinar y comer, y soñar despierta mientras elabora nuevas tramas.