En los últimos años la extrema derecha ha hecho todo lo posible por acelerar el calentamiento global, incluso un presidente estadounidense que lo considera un engaño ha eliminado los límites a la producción de combustibles fósiles. El presidente brasileño ha abierto el Amazonas y lo ha visto arder. En Europa, los partidos que niegan la crisis medioambiental e insisten en la máxima combustión han irrumpido en varios Gobiernos, de Suecia a España. Al borde del colapso, han surgido las fuerzas que más agresivamente promueven el business as usual, siempre en defensa del privilegio blanco, contra supuestas amenazas de otros no blancos. Pero ¿de dónde vienen estas fuerzas? El primer estudio sobre la extrema derecha ante la crisis climática, Piel blanca, combustible negro, presenta un elocuente rastreo de una nueva constelación política, y revela sus profundas raíces históricas. Las tecnologías que utilizan combustibles fósiles nacieron impregnadas de racismo. Nadie las amó con más pasión que los fascistas clásicos. Ahora han surgido fuerzas de derechas, algunas de las cuales afirman tener la solución: cerrar las fronteras para salvar a la nación mientras el clima se desmorona. Épico y fascinante, Piel blanca, combustible negro traza un futuro de frentes políticos que no podrá dejar de caldearse.
Sobre el autor
Fässberg (Suecia), 1977. Profesor asociado de Ecología Humana de la Universidad de Lund, en Suecia, y miembro del consejo editorial de la revista Historical Materialism, Malm está interesado en una amplia gama de aspectos de las relaciones de poder en un mundo que se calienta rápidamente y necesita enfriarse con urgencia. Su investigación se centra en varios aspectos de la crisis climática. Entre otros libros, es autor de The Progress of This Storm: Nature and Society in a Warming World y Black Fuel: On the Dangers of Fossil Fascism. Forma parte de un proyecto de investigación sobre tecnologías de emisiones negativas. Más específicamente, Malm analiza el surgimiento del carbón como fuente de energía mecánica en la producción industrial y el transporte en la Gran Bretaña del siglo XIX y su imperio. Su tesis doctoral, Fossil Capital: The Rise of Steam-Power in the British Cotton Industry, c. 1825-1848, and the Roots of Global Warming, defendida en 2014, examina la transición de las ruedas hidráulicas a las máquinas de vapor en las fábricas de algodón del norte de Inglaterra y Escocia y extrae algunas lecciones para la actualidad: para resumir una larga historia, el capital requería una fuente de energía susceptible de concentración en el espacio y aceleración en el tiempo. Todavía sigue haciéndolo. En 2016, publicó el presente libro, basado en la tesis mencionada. Ese mismo año, Malm fue galardonado con el Premio Isaac y Tamara Deutscher Memorial.