Mucho se ocupó el siglo XIX de la mente humana. Fue el tiempo en el que nació la psiquiatría y el psicoanálisis y en el que varios estudiosos, sobre todo galos se preguntaron si la escritura no es la huella del delirio solitario. En 1934, Raymond Queneau buscó editorial para su manuscrito En los confines de las tinieblas que es una antología de los alienados franceses del siglo XIX que fueron publicados. No fue el primer intento, pero sí el más esforzado, por presentar la locura a través de las letras. Escribir puede derivar en la vesania o quizá sea un conjuro para ella. No por nada Georges Bataille dijo: ‘pienso que lo que me obliga a escribir es el miedo a volverme loco’. Pero, ¿es posible que los libros conduzcan a la demencia?
A propos de l’auteur
Gustave Flaubert.