‘Un hombre se obsesiona con los ladridos de un perro anónimo y, sin darse cuenta, se desliza poco a poco a un abismo del que no saldrá. Una piadosa mujer descubre su cuerpo en una institución para enfermos mentales. Una chica dispuesta a experimentar sexualmente es intercambiada como objeto y aprende en el tránsito una peculiar lección. En este libro de cuentos de Julieta García González, el narrador sabe que el secreto de su arte es el secreto del encantador, y dispone sus palabras en puente hacia lo maravilloso. De modo que el afortunado lector tiene una cita con esta narradora de pura cepa, una alquimista del verbo. Hora de perderse en sus encantos y gozar con sus sorpresas.’