La única solución: ¡una boda real de conveniencia!
Para salvar a su reino, al borde de una guerra civil y una crisis económica, el príncipe Mateo Karavitis debía ocupar el trono y encontrar una esposa. El problema era que esa esposa no podía ser una mujer cualquiera; era importante que escogiera bien. Por suerte, tenía a la candidata ideal en mente, su amiga Rachel Lewis.
Sin embargo, a Rachel su proposición de matrimonio la dejó totalmente desconcertada. Se conocían desde hacía años y siempre se había sentido atraída por él, pero… ¿cómo iba a ser ella reina de un país? ¿Y podría ser feliz en un matrimonio sin amor y no acabar con el corazón destrozado?