Una combinación de las películas Manhunt, Killing Pablo y Zero Dark Thirty, esta sensacional obra de misterio, y de alta tecnología de investigación, de Andrew Hogan y Douglas Century —que pronto será una gran película producida por Sony— es una crónica impresionante de un capítulo en la guerra contra las drogas en el siglo veinte: la experiencia exclusiva de un agente federal estadounidense y sus ocho años de cacería tras El Chapo — el capo de la droga más buscado del mundo, que evadió a la ley por más de una década.
Toda generación tiene un criminal: Jesse James, Billy the Kid, John Dillinger, Al Capone, John Gotti, Pablo Escobar. Pero cada uno de estos notorios delincuentes tenía a un investigador rastreando sus pasos: Wyatt Earp, Pat Garrett, Eliot Ness, Steve Murphy. Para el señor de la droga, Joaquín Archivaldo Guzmán, Loera, mejor conocido como “El Chapo”, ese policía es Andrew Hogan, exagente especial de la Drug Enforcement Administration (Oficina de Control de Drogas; DEA, por sus siglas en inglés).
En el 2006, recien graduado de la Academia de la DEA, Hogan se dirige a Arizona, en donde rápidamente se encuentra dentro de una serie de espeluznantes casos encubiertos, que lo coloca, sin darse cuenta, tras la pista de Guzmán, el jefe del cártel de Sinaloa, un multimillonario según Forbes, y enemigo público # 1 de Estados Unidos. Seis años después, como jefe de la Oficina de la DEA en la ciudad de México a cargo del cártel de Sinaloa, Hogan se da cuenta que su vida y la del Chapo están irónicamente, en sendas paralelas: ambos se obsesionan por los detalles.
En una nueva versión de los clásicos del oeste, pero a escala mundial, Cazando a El Chapo relata la búsqueda de Hogan por lograr lo que parecía imposible, desde infiltrarse en el círculo íntimo de El Chapo, a dirigir una cacería humana con una brigada elite de oficiales de la marina mexicana; derribando una a una las fortalezas del cartel, y en última instancia llevando al Chapo a la justicia.
Este relato cinematográfico que narra la implacable investigación de Hogan y su equipo se desarrolla a gran velocidad, llevando al lector trás bastidores en una de las operaciones antinarcóticos más sofisticadas y peligrosas en la historia de Estados Unidos y México.