El señor Otis, Ministro de los Estados Unidos de América, viaja a Inglaterra con su familia y se instala en una casa de campo encantada. Lord Canterville, el anterior propietario de la casa, le advierte que el fantasma de Sir Simon de Canterville la habita desde que mató a su esposa, hace más de tres siglos. El Ministro descarta la historia del fantasma como una patraña y hace caso omiso de las advertencias de Lord Canterville. Cuando los Otis comprueban que la casa está realmente encantada, convierten al fantasma en víctima y hacen caso omiso de las ancestrales tradiciones británicas.
Lo que surge es una sátira del materialismo americano, una burla de los valores británicos tradicionales y una divertida variación al cuento de terror gótico tradicional. En ese marco, sin embargo, la solidaridad está siempre presente y concluyen la historia desde la perspectiva humana.
Como todo buen texto escrito para la juventud, El fantasma de Canterville, es un libro que puede ser leído a cualquier edad y al que uno vuelve con gusto siendo ya mayor. La historia no ha perdido nada de su frescura y esta nueva traducción al español permite una lectura amena y accesible a todos.