La isla del doctor Moreau, nos cuenta, de manera magistral, el terror del alcance de la imaginación, el lado oscuro de la ciencia y la capacidad del ser humano para convertir la naturaleza en una aberración. Así como muchas de sus obras, Wells nos advierte una cosa: la ciencia y la tecnología, más allá de un beneficio, podrían resultar en nuestras enemigas. Al ser un hombre de ciencias, Wells no sólo dedicó su literatura a la ciencia ficción, sino que también se amplió a las novelas sociales. Wells murió a causa de un tumor en 1866.
O autorze
H. G. Wells, a diferencia de muchos otros escritores de su género, era un hombre de ciencia. Lo que lo ayudó a relatar un gran número de novelas de ciencia ficción como ningún otro autor; considerado, incluso, incomparable. Su obra más notable, La guerra de los mundos, puso a la sociedad de cabeza cuando la relataron por una estación de radio.