Milagro en la isla
Nikos Vassalos se había convertido en una sombra de sí mismo y se había aislado en su yate de lujo. Pero su amarga soledad se vio interrumpida por una mujer en avanzado estado de gestación que le dijo que iba a ser padre.
Stephanie Marsh estaba decidida a que su bebé supiera quién era su padre. Pero se encontró con un Nikos frío y desconfiado muy diferente del hombre del que se había enamorado.
Pasión en Grecia
Un adolescente había desaparecido en la isla griega de Stavros Konstantinos y el millonario rebelde acabó implicándose en la búsqueda junto a Andrea Linford, una preciosa guía turística.
Una vez acabada la heroica misión, ambos comenzaron a explorar esa chispa que había surgido entre ellos. Andrea siempre había creído que el amor era algo que le ocurría a los demás, pero después de dos días de felicidad junto a Stavros iba a darse cuenta de la profundidad de sus sentimientos. ¿Sería capaz de dejar atrás el pasado y de dar un paso hacia el futuro, con él a su lado?
O autorze
La escritora americana Rebecca Winters es madre de cuatro hijos y vive en Salt Lake City, Utah. Cuando tenía 17 años, estuvo interna en Lausana, Suiza, donde aprendió a hablar francés y conoció a chicas de todo mundo. Al volver a Estados Unidos, Rebecca desarrolló su amor por los idiomas y se licenció en Filosofía y Letras.
Rebecca confiesa que se hizo escritora casi por accidente: 'Me inicié poco a poco como escritora. Al principio, no me gustaba nada escribir, solamente rellenaba lo impresos obligatorios para el colegio. Si cualquiera me hubiera dicho que iba a ser escritora, y que además me encantaría, yo me habría reído y lo habría encontrado completamente absurdo y ridículo. Escribía cartas a mis padres cuando estaba en el internado con 17 años. Mi madre las guardó todas y un día, después de ser madre por segunda vez, me las envió y me pidió que escribiera mis memorias para ellos. En aquel momento pensé que se había vuelto loca, pero como adoro a mi madre, lo hice tal y como me lo propuso. Cuando había terminado de ordenar todos esos pensamientos de la adolescencia, observaciones y opiniones, las semillas de una historia habían comenzado a formar parte en mi cabeza. La semilla se convirtió finalmente en una novela que se publicó en 1979. Se llamó The living Season, y se publicó bajo el nombre Rebecca Burton. Naturalmente, se desarrolló en Suiza y Francia. Unos años más tarde empecé a publicar con Harlequin. Supongo que la moraleja de esta historia es, ¡nunca infravalores la intuición de una madre!’