«Mac Donald consigue un diálogo eficacísimo, algunas oportunas gotas de humor y una evidente comprensión del alma infantil. Es muy probable que sus hijos, sin saberlo, le enseñaran tanto como él a ellos». Del prólogo de CARMEN MARTÍN GAITE
La princesa huérfana Irene vive en un majestuoso castillo en lo alto de una montaña. Su padre el rey viaja continuamente a países lejanos, mientras bajo la montaña que corona el castillo, los mineros trabajan sin descanso para sacar a la luz las riquezas profundas de la tierra. Irene, inquieta, soñadora, independiente, es incapaz de esperar pacientemente el regreso de su padre, no solo porque el lugar adecuado para una niña no es el cuarto del bordado, sino porque, primero los trasgos, astutos y pérfidos, se han confabulado para raptarla y obligarla a casarse con su príncipe, y luego, porque el don de adivinar quién es humano y quién bestia con solo tocarlo que la gran-más-que-abuela ha concedido a su amigo Curdie, no han hecho otra cosa que complicarle la vida.
Sobre o autor
Carmen Martín Gaite (Salamanca 1925-Madrid 2000), novelista, poeta, ensayista y traductora, publicó su primera novela El balneario en 1955 y es una de las más destacadas representantes de la generación de la posguerra. De sus libros hay que destacar Entre visillos (Premio Nadal 1958), Ritmo lento (1963), El cuarto de atrás (1978), El cuento de nunca acabar (1983), Usos amorosos de la postguerra española (Premio Anagrama de Ensayo 1987), Nubosidad variable (1992), Lo raro es vivir (1996) o Irse de casa (1998). Carmen Martín Gaite ha recibido también los premios Príncipe de Asturias 1988 y el Nacional de las Letras Españolas 1994.