Horacio tiene conciencia de que sus Odas son lo mejor de su obra y afirma que serán más duraderas que el bronce. Son composiciones de carácter lírico, obra cumbre de la lírica latina. Trata en ellas diversos temas: alabanzas a su amigo César Augusto, elogio de la amistad, filosofía y moral, el amor, el campo y la naturaleza. Expone su filosofía de la vida: hay que hacer buen uso de las riquezas y ser generoso; no hay que dejarse abatir por la adversidad y gozar de los bienes presentes, que son precarios; lo mejor para ser feliz es la «áurea medianía». Hay una invitación a gozar del momento presente, ya que el día de mañana es incierto: «carpe diem». Este tema tendrá gran fortuna en la literatura universal. Horacio consigue expresar lo que quiere con una perfección casi absoluta. El Libro de los Epodos contiene obras divertidas y serias, de tono amistoso y puede considerarse la primera autobiografía del mundo, persiguiendo un fin moral y crítica social. El epodo es una composición de origen griego destinada al insulto y al improperio. Destaca entre ellos su alabanza de la vida en el campo.
Tabela de Conteúdo
Presentación de Guillermo Díaz-Plaja
Aproximación a Horacio, por Vicente López Soto
Odas
Libro I a IV
Libro de los Epodos
Canto secular
Sobre o autor
Quinto Horacio Flaco ( Venosa, 65 a. C.-Roma, 8 a. C.), conocido como Horacio, fue el principal poeta lírico y satírico en lengua latina. Fue un poeta que se expresaba con una perfección casi absoluta. Los principales temas que trató son el elogio de una vida retirada y la invitación de gozar de la juventud («carpe diem»), temas retomados por poetas españoles como Garcilaso de la Vega y Fray Luis de León. Escribió, además, epístolas y creó elegantes versos hexamétricos (Sátiras y Epístolas) y cáustica (Epodos). Los hexámetros son obras divertidas pero serias, de tono amistoso. Su carrera coincidió con el cambio de Roma de república a imperio. Oficial del ejército republicano derrotado en la Batalla de Filipos en el 42 a. C., se hizo amigo de la mano derecha de Octavio en asuntos civiles, Mecenas, y se convirtió en portavoz del nuevo régimen. Parece que su asociación con el régimen era un fino equilibrio para mantener su independencia. Horacio puede considerarse el primer autobiógrafo del mundo. En sus escritos, nos cuenta mucho más sobre sí mismo, su carácter, su desarrollo y su forma de vida, que cualquier otro gran poeta de la antigüedad.