Una joven embarazada baja de un tren en una estación desierta para recorrer un camino inhóspito y salvaje. Una mujer se enfrenta a la soledad de su cabaña después de talar un árbol y ser derribada por una de las ramas, que la deja inmovilizada.
Una madre ha de abandonar su casa para defenderse del ataque de un hombre, y huye con su hijo atado al pecho.
Los relatos de Barbara Baynton sitúan a sus protagonistas en el paisaje indómito de las regiones australianas del interior, lejos de las ciudades, y las somete al aislamiento y los rigores de un entorno feroz que las obliga a luchar por su propia supervivencia día tras día, con la única compañía de sus perros. No hay ayuda, no hay miradas afables ni compasión en la naturaleza inexplorada a la que llegan los personajes de Baynton. Su único recurso es el de la resistencia, la obstinación e incluso la ira.
Barbara Baynton, una de las grandes pioneras de la literatura australiana y una de sus voces más destacadas y personales, muestra en estos relatos lo macabro y lo terrible de la vida aislada en un espacio que no hace concesiones.
Despre autor
Barbara Baynton nació en Scone, Nueva Gales del Sur, Australia, en 1857. Tras ser abandonada por su primer marido con tres hijos a su cargo, se mudó a Sídney, y se casó con el doctor Thomas Baynton, que la hizo ascender socialmente.
Pronto empezó a publicar relatos en The Bulletin. Seis de ellos se reunirían en Estudios de lo salvaje (1902), que fue publicado en Inglaterra tras ser rechazdo por varios editores australianos por sus descripciones poco benévolas de la dureza de las regiones del interior y por el poco orgullo nacional que mostraban. Publicó Human Toll, su única novela, en 1907, y en 1917 vería la luz Cobbers, una nueva antología de relatos que añadía dos a los ya recogidos en Estudios de lo salvaje.