Sara Gallardo 
Vivir de viaje [EPUB ebook] 

Toda bicha que camina, por Lucía De Leone
I. Tretas para viajar
Reportajes antisensacionales I
Cómo viajar hacia el mar en autobús. (¿Cómo?)
Viajes y virajes
Cómo ser un viajero elegante
Viajes
Sorpresas africanas
La ridiculez de ser turista en el más allá
Cómo viajar por Provenza con una bolsa al hombro
Cómo es volver de un viaje
II. Desde Europa
Veinte años después del nazismo
Saulo, ¿por qué me persigues?
Brigitte Nielsen. ¿Qué harían los italianos sin esas rubias que vienen del frío?
España, los dilemas del yang y la carta a Maripepa
A partir de las noticias locales
Mods, rocks y el ave tropical
Con Alexander Zinoviev, maestro de pensar
La Cruzada
Belén, alcaldes y otras cosas
Los jóvenes, vencidos por la droga
Teatro de Europa, por encima de las lenguas
Dónde comer en Roma
Nieve en el horno
Volvió Navidad a Roma
Novedades en Carnaval
¿Ese esquiador…? ¡El papa!
Hallazgo de un hospital prehistórico en Italia
Este año Italia encumbra a la ciudadana chic
Gianni Guadalupi, scout en el País de Nunca Jamás
Presencia de Bioy
Las italianas optan entre la serenidad y el alboroto
Argentina sta accà
Dos hoteles en Barcelona
Italia, moda, primavera: la fantasía a todo trapo
La ropa de hombre ya no es la misma
Roma empieza en sus trattorias
Recuerdo de un diálogo con La Nación
Silvina Benguria: una argentina, personaje en Roma
La película del rey, ovacionada en Venecia
La película del rey y un nuevo galardón para el cine nacional
’Wojtila está en el jaleo’
Bajo un templo. La otra Roma
Para vestir con donaire, moda hecha para hombres
Misceláneas de la Unión Soviética
La loca y millonaria carrera emprendida por los hongos frescos
Emperadores y esposas
Fue raro estar allí
Nápoles está toda celeste
Sur, una expresión de gratitud
Elogios para Sur
III. Por América
Carta a Isabelín
Nueva York cada jueves
Notas de color
Pobres de los pobrecitos en Nueva York
Esos pueblos rubios, eficaces, cándidos
Las enseñanzas del Electric Circus
Por donde vagan Charlie y sus iguales
Fiesta en un sexto piso de la calle 13
’To sleep, perhaps to dream…’
Gelinita con chantilly
¿Qué tiene de malo, Sara?
Buen provecho
Punta del Este: club de clubes
El Palace e historial de Punta
Días nublados: entre la siesta y la compra
Una mujer en carne viva, por Daniel Pliner
IV. En Argentina
Viaje a caballo. Una carta de Sara Gallardo
¡Vamos al viejo Sur!
La noche porteña
¡Hoy me mudo a San Isidro!
El Tigre: un sitio flor
Reportajes antisensacionales II
Tucumán: los deleites del bombón
Jujuy con todo
Salta, el broche de oro
La historia de Lisandro Vega
Vacaciones en Salta: a comprar
Mucha lluvia y más fernet. Bariloche III
Ir a Luján
Tucumán en verano
Navidad desde el agua
Año nuevo, agua nueva
¡Epa, che!
’Yo de perros no sé nada’, por Luisa Valenzuela
Los objetos de El Paraíso

Sara Gallartdo (Buenos Aires, Argentina, 1931 – 1988), destacadísima escritora argentina, nació en Buenos Aires en 1931. Nieta del célebre naturalista y ministro argentino Ángel Gallardo, bisnieta de Miguel Cané y tataranieta de Bartolomé Mitre, la amplia biblioteca de su casa familiar le abrió tempranamente las puertas de la literatura. Enero, su primera novela, apareció en 1958 y obtuvo excelente recepción crítica. Le siguieron Pantalones azules (1963); Los galgos, los galgos (1968), que la consagró ante el gran público y con la que ganó el Premio Municipal; Eisejuaz (1971), obra que confirmó la singularidad de su escritura; y La rosa en el viento (1979). Además de novelas, escribió literatura para niños y un libro de relatos (El país del humo, 1977). Fue también colaboradora de las revistas Primera Plana y Confirmado, entre otras, así como del diario La Nación. Gallardo estuvo casada dos veces, con el escritor y guionista Luis Pico Estrada y, posteriormente, con H. A. Murena. A fines de los años setenta dejó la Argentina y comenzó a trabajar como corresponsal en Europa; viajera, visitó países de América, Europa y el Cercano Oriente. Murió en Buenos Aires en 1988.