Durante un tiempo fui vecino de las pirámides del Templo Mayor. Caminaba todos los días por las calles del Centro Histórico, atento a las señales. Tengo la convicción de que la Ciudad de México quiere contarme historias, y ese destino es palpable en los cuentos de Mar Negro: el edificio más emblemático del Eje Central convocó a sus distintos avatares en Torre Latino, el eterno letrero de SE RENTA en un viejo inmueble me hizo imaginar la historia secreta de la urbe en ‘Como dos gotas de agua que caen en el mar’; un vecino desvalido y su sospechosa actitud me llevaron a inventarle una doble vida en ‘El ciego’; la Plaza de las Tres Culturas y su pasado sangriento me sugirieron una justa venganza, en clave de zombies, en ‘La otra noche de Tlatelolco’. Aparte de mi obsesión por el lugar que alguna vez albergó a la Gran Tenochtitlán, hay mucho más en estas páginas. Criaturas mutantes que prosperan al cobijo de la laguna de Bacalar; unos gemelos conectados con Neil Armstrong y con el lado oscuro de la Luna; una mujer empeñada en revivir -a cualquier costo- a su amante muerto; un coleccionista de muñecas embrujadas que recibe un misterioso regalo, y un vampiro que escapa de su tumba en la ciudad búlgara de Sozopol. Esta última referencia al Mar Negro representa para mí el espíritu del libro: un estado del alma donde lo sobrenatural es posible. Una extensión que, sobre todo, se localiza en el interior de la mente; en las supersticiones y los abismos creados por la imaginación. Para comprenderlo, es necesario nadar en las profundidades de estas aguas.
Bernardo Esquinca.
Про автора
Bernardo Esquinca nació en Guadalajara, Jalisco, en 1972. Narrador y periodista, ha colaborado en revistas como Letras Libres y Nexos con reseñas sobre libros y cine. Escribe sobre pornografía y nota roja en www.sensacionald.com. Parte de su obra está antologada en libros como Grandes Hits. Nueva generación de narradores mexicanos (Almadía, 2008), Novísimos cuentos de la República Mexicana (2004) y Tierras insólitas (Almadía, 2013). Ha publicado las novelas Belleza roja (2005), Los escritores invisibles (2009), La octava plaga (2011; Almadía, 2017), Toda la sangre (Almadía, 2013), Carne de ataúd (Almadía, 2016), Inframundo (Almadía, 2017); los libros de cuentos La mirada encendida (1993), Fábulas oscuras (1996), y los títulos que conforman la ‘Trilogía del Terror’, que son Los niños de paja (Almadía, 2008), Demonia (Almadía, 2012) y Mar negro (Almadía, 2014); así como el ensayo Carretera perdida: un paseo por las últimas fronteras de la civilización (2001).
Junto a Vicente Quirarte realizó la antología Ciudad fantasma. Relato fantástico de la Ciudad de México (XIX-XXI) publicada en dos volúmenes por Almadía.