Los ensayos de Michel de Montaigne están contenidos en tres libros y 107 capítulos de diversa extensión. Originalmente se escribieron en francés medio y se publicaron originalmente en el Reino de Francia. El diseño declarado de Montaigne al escribir, publicar y revisar los Ensayos durante el período de aproximadamente 1570 a 1592 fue registrar ‘algunos rasgos de mi carácter y de mis humores’. Los ensayos se publicaron por primera vez en 1580 y cubren una amplia gama de temas.Montaigne escribió en una retórica bastante elaborada diseñada para intrigar e involucrar al lector, a veces pareciendo moverse en una corriente de pensamiento de un tema a otro y otras veces empleando un estilo estructurado que da más énfasis a la naturaleza didáctica de su trabajo. Sus argumentos a menudo se respaldan con citas de textos griegos, latinos e italianos antiguos, como De rerum natura de Lucrecio y las obras de Plutarco. Además, sus ensayos fueron vistos como una contribución importante tanto a la forma de escritura como al escepticismo. El nombre en sí proviene de la palabra francesa essais, que significa ‘intentos’ o ‘pruebas’, que muestra cómo esta nueva forma de escritura no tenía como objetivo educar o probar. Más bien, sus ensayos fueron viajes exploratorios en los que trabaja a través de pasos lógicos para llevar el escepticismo a lo que se está discutiendo.
关于作者
Michel Eyquem de Montaigne fue uno de los escritores más influyentes del Renacimiento francés. Montaigne es conocido por popularizar el ensayo como género literario. Se hizo famoso por su capacidad sin esfuerzo para fusionar especulaciones intelectuales serias con anécdotas casuales y autobiografía, y su volumen masivo Essais (traducido literalmente como ‘Intentos’) contiene, hasta el día de hoy, algunos de los ensayos más influyentes jamás escritos. Montaigne tuvo una influencia directa en los escritores de todo el mundo, desde William Shakespeare hasta René Descartes, desde Ralph Waldo Emerson hasta Stephan Zweig, desde Friedrich Nietzsche hasta Jean-Jacques Rousseau. Era un católico conservador y sincero, pero, como resultado de su mentalidad anti-dogmática, es considerado el padre, junto con su amiga contemporánea e íntima Étienne de La Boétie, de la tradición ‘anticonformista’ en la literatura francesa.