Publicada en 1947, ‘Su nombre era Muerte’ no tiene ninguno de los elementos comúnmente asociados con la ciencia ficción que se hicieron populares en aquel periodo – robots, naves espaciales, planetas lejanos, etcétera – pero sí, en cambio, una especulación muy interesante sobre la posibilidad de una inteligencia no humana, paralela a las de obras que van de ‘Hacedor de estrellas’ (1937) de Olaf Stapledon a ‘Solaris’ (1961) de Stanisław Lem.Aunque estas novelas son muy diferentes a ‘Su nombre era Muerte’, en las tres hay la misma pregunta: ¿qué sucedería si los seres humanos realmente encontráramos otras formas de conciencia?
Las posibles respuestas pasan todas por extrañamiento ante lo desconocido, el descubrimiento de límites en la inteligencia humana (que acaso no podría comprender un pensamiento totalmente ajeno al suyo) y la constatación de nuestra finitud y pequeñez: como otros autores que exploran las experiencias humanas más misteriosas y traumáticas, Bernal enfatiza nuestro desvalimiento ante lo que no alcanzamos a comprender… y también las formas en que, en semejantes circunstancias, nuestros instintos más primitivos amenazan con apoderarse de nosotros.
关于作者
Rafael Bernal (Ciudad de México, 28 de junio de 1915- Berna, Suiza, 17 de septiembre de 1972), viajero incansable, fue periodista, traductor, guionista de radio y televisión, diplomático, activista político. De formación filosófica, Rafael Bernal se doctoró en literatura por la Universidad de Friburgo, Suiza. Su producción literaria, prolífica, abarca poesía, teatro, novela, biografía, ensayo, cuento. La obra de Rafael Bernal, autor de ‘El complot mongol’, merece y puede, como bien lo apunta Alberto Chimal en el prólogo de la presente edición, recibir todavía a muchos lectores, y en ella esta novela es de las más atrayentes: de las más intrigantes y vivas.